El separador aire es un componente fundamental en cualquier sistema de granallado. Ubicado generalmente sobre la tolva de almacenamiento, su función principal es eliminar contaminantes de la mezcla operativa de granalla, así como controlar el tamaño del abrasivo retenido y descartar materiales como abrasivos muy finos y contaminantes removidos de las piezas. Esto asegura que solo el abrasivo limpio llegue a la tolva, mejorando la calidad del proceso.
La eficiencia del separador es un parámetro crítico en los costos de operación, y es esencial tener en cuenta los ajustes necesarios para optimizar su funcionamiento, como la extracción de finos del sistema y el flujo de aire que atraviesa el separador.